El orden secreto de lo cotidiano y el eros de la nostalgia, son las marcas de esta poesía que elude lo enfático y se afirma en una economía de lenguaje. Entre los pliegues de esa trama asoman versos en italiano –la lengua madre de Zecchin– dibujando un diálogo en el que es posible detectar sus poetas de vecindad: los paisajes de la memoria de Quasimodo, la textura de sombras de Ungaretti.
Sobre ese decir despojado se desliza una: “marea baja/ a ras del hambre”, y esa madre que: “repartió el silencio/ con su misma cuchara”. La autora, que conoce el peso de ese silencio, nos advierte que: “al tacto las palabras duelen”.
Si In movimento es un viaje espoleado por preguntas, hay que decir que las riendas del jadeo están en manos de la mirada. Un entorno “entrevisto” que, vislumbrado a hurtadillas es, a un tiempo, ver e imaginar. Sobre esos ojos de agua flotan baúles, fotografías, naipes de adivinar, letanías de lavanderas y un ritual de gestos familiares.
La preponderancia de lo visual se apoya en imágenes intensas que más que ceñir el tema lo enmarcan con versos a ratos susurrados, y siempre contundentes, como esa línea donde colisionan dos mundos: “pescaban truchas vivas/ las arrojaban al aceite hirviendo”.
Postales de una mirada atenta a los mensajes cifrados que viajan de una boca a la otra, de una orilla a la otra, y nos entregan un libro conmovedor.
Jorge Boccanera
Gigliola Zecchin
escritora y periodista. Nació en Vicenza, Italia, en diciembre de 1942. Llegó como inmigrante a la Argentina, país en el que reside desde entonces. Estudió letras modernas en la Universidad Nacional de Córdoba. Es autora entre otros libros de Paese, La piedra de la paciencia y de un trabajo colectivo: 5 Poetas italianos en traducción. Sus cuentos y poemas integran numerosas antologías.